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Hartner marca un hito en el ámbito de la sostenibilidad al introducir gradualmente y con efecto inmediato envases fabricados con plástico reciclado. Con esta innovadora medida, Hartner se convierte en el primer fabricante alemán de herramientas que utiliza el plástico reciclado como material de embalaje. Esta decisión permite a la empresa ahorrar al medio ambiente la impresionante cantidad de 234 toneladas de plástico de nueva producción al año.
Como distribuidores de maquinaria usada, hemos tenido el tema de la sostenibilidad en el punto de mira desde la fundación de la empresa y estamos encantados de que cada vez más empresas piensen de forma sostenible.
En un contexto global, en 2050 se habrá creado una "montaña de plástico" de 12.000 millones de toneladas, una carga inmensa para el medio ambiente. El material de envasado representa más de un tercio de esta montaña, y actualmente sólo una mínima proporción se recicla o incinera. Como consecuencia, el 79% del plástico acaba en los vertederos o directamente en el medio ambiente. Ante este problema, Hartner ha decidido conscientemente no seguir implicándose en este escenario y busca soluciones sostenibles en el ámbito de los envases.
La decisión de suministrar el 95% de sus productos en embalajes de plástico se basa en el extraordinario efecto protector del plástico sobre las herramientas de corte de alta calidad durante el transporte, que también apreciamos al vender brocas de metal duro Hartner. Con el fin de proteger el medio ambiente, Hartner apuesta por soluciones de embalaje reciclables fabricadas al 100% con plástico reciclado, concretamente con reciclado postconsumo (PCR). Éste se obtiene de los residuos plásticos que los hogares desechan a través de la bolsa amarilla y las máquinas de depósito.
El cambio a este envase sostenible está dando resultados impresionantes: El uso de plástico PCR ahorra 234 toneladas de plástico nuevo al año y las emisiones de CO2 del sector de los envases se reducen un 77%. Hartner subraya que este paso no sólo contribuye a reducir el consumo de plástico, sino que también tiene sentido desde el punto de vista económico, ya que los envases son tan resistentes y eficaces como los de plástico convencional.
La cooperación con rose plastic AG, un experimentado fabricante de envases reciclables, apoya a Hartner en este cambio. El objetivo es cambiar el 90% de todos los materiales de envasado a alternativas más sostenibles para finales de 2022, incluidas las etiquetas. Así pues, el gris se convertirá en el nuevo negro, y los clientes de Hartner no sólo recibirán herramientas de alta calidad, sino también una "bonificación medioambiental" gratuita en forma de envases sostenibles.
